Estudio revela violencia género no solo afecta estratos socio-económicos bajos

El 60% de 718 mujeres evaluadas por el Patronato de Ayuda a Mujeres Maltratadas (Pacam) cuentan con niveles académicos de grado y postgrados universitarios, lo que desmitifica la teoría de que las víctimas de violencia y maltrato, corresponden a un segmento poblacional de escasos ingresos y bajos niveles de escolaridad.

Asimismo el estudio realizado con 718 mujeres, entre el 2009 y 2017 reveló que del total señalado 478, un 56% no saben donde ir a querellarse y solo 240 han puesto la denuncia.

Los detalles fueron ofrecidos por la directora del Pacam Soraya Lora, al participar en la mesa redonda sobre seguridad y justicia, realizada por la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), con el tema Aspectos jurídicos de los feminicidios.

Otro aspecto revelado por Lora en el panel fue que el 12% de las 718 mujeres han recibido amenazas de muerte y el 13.8% los maridos conducen a alta velocidad en vía contraria, como forma de, intimidarlas. Asimismo, el 21.6% ha intentado ahorcarlas; el 6% usa armas de fuego y el 2.8% le apunta con el arma y otros la golpean con la cacha.

Lesiones: desgarro de tímpano. Dentro de los tipos de lesiones con que llegaron las mujeres que fueron en procura de ayuda están la rotura de tímpano y el desgarramiento de la retina, por golpes propinados en la zona de la cabeza. A esos se suman los más frecuentes que son los moretones, fracturas de brazo y tabique de la nariz.

Sobre los intentos de feminicidios las mujeres dijeron que ha sufrido intentos de ahorcamiento, amenazas de muertes con armas de fuego, cuchillos y heridas con machete.

No creen en caminatas. La directora del Pacam se sumó al criterio del vicepresidente ejecutivo de la Finjus, Servio Tulio Castaños Guzmán, de que con caminatas no se resuelve el problema.

“No resuelve nada en absoluto, quizás es una forma de visibilizar que hay conciencia de la problemática, pero estamos hablando de cambios culturales, cambios de patrones y subordinación de dominio, que realmente con una caminata no se resuelven”, dijo Lora.

Urge Código Penal. Respecto al tema, Castaños Guzmán criticó el hecho de que el país aun no cuente con un Código Penal actualizado, que contemple aspectos tan fundamentales como el feminicidio.

Puso como ejemplo que el caso de Víctor Alexander Portorreal, confeso asesino de su pareja y tres niños de esta, que, de haberse contado con una nueva normativa, sería procesado en base al cúmulo de pena, por los hechos que cometió.

“Ciertamente estamos en presencia de un verdadero monstruo, esa es la realidad. Yo no se que es lo que el Estado va a hacer con eso, yo no creo que uno tiene que tener cierto nivel de compasión, pero no creo que ningún dominicano se puede solidarizar con una acción de esa naturaleza”, expresó Castaños.

Recordó que hay tipos penales que el propio sistema de justicia no puede dar respuesta y muchas veces no están las herramientas para poderlos definir, como es el caso mismo de los feminicidios.

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